
Perspectivas catalizadoras: entrelazar la fe y la ciencia para construir la paz y la justicia en México
Ante la terrible violencia en su país natal, México, Sandra Márquez cree que ninguna acción es demasiado pequeña cuando se trata de trabajar por la verdadera paz, el shalom de Dios. En esta entrada del blog de perspectivas catalizadoras, Sandra comparte cómo su proyecto de la Iniciativa Logos y Cosmos está preparando a los estudiantes para ser agentes de paz y justicia. Sandra es profesora universitaria y actualmente está terminando un doctorado en psicología social.
“Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo” decía el escritor uruguayo Eduardo Galeano. Esta frase me recuerda que ningún esfuerzo debe soslayarse, todos son necesarios ante los grandes retos que se enfrentan en estos días en mi país, México.
Desde 2006 el gobierno mexicano declaró una “guerra contra los cárteles de la droga1”. Desde entonces, la situación de violencia que se ha instaurado en mi país ha traído consigo mucho sufrimiento. Homicidios, feminicidios, balaceras, más de 130 000 personas “desaparecidas”, numerosas extorsiones y secuestros que, en suma, han dado lugar a un clima de desconfianza y desintegración social. Estos delitos son provocados por las operaciones del crimen organizado en complicidad con distintas instituciones y con amplia difusión en los medios de comunicación.
Cada uno de esos crímenes tiene un impacto profundo. Es como una onda que se expande, primero afectando a la víctima directa, pero también a su familia, su círculo de amigos, su lugar de estudio, su trabajo y la comunidad en donde vive. Así, por cada delito hay muchas personas que viven los efectos del dolor de estos tiempos.

Si algo aprendemos de la perspectiva de Misión integral del teólogo ecuatoriano René Padilla, es que — cada necesidad humana, es un campo de misión cristiana —, por lo tanto, la iglesia está inmersa en una sociedad y no puede ignorar sus dinámicas, entendiendo que no podemos separar la teología del contexto, entonces, debemos caminar con la biblia en una mano y el periódico en la otra (como lo dijo en una ocasión el teólogo Karl Barth).
México es el tercer país más violento en América latina, según el Global Peace Index Report 20222 , que mide el nivel de paz y de ausencia de violencia en 163 países del mundo.
Si partimos de la ausencia de paz, debemos pensar en el significado del concepto. La paz, al menos en occidente, muchas veces se vincula con la pax romana, que el imperio romano concebía como la ausencia de guerra. Por consiguiente, para muchas personas la paz representa calma o una existencia tranquila y pasiva. En cambio, el concepto hebreo de Shalom que se traduce en un estado de bienestar, para el pueblo hebreo, significaba la paz completa. En su acepción más profunda, significa bienestar integral y puede usarse como sinónimo de prosperidad y seguridad (Sal. 85: 8-10).
Este Shalom tiene que ver con relaciones sanas con Dios, con otras personas y con la tierra. Esta paz es un don de Dios (Is. 52:7). No sería adecuado reducirlo a la idea de pasividad, sino de acción y construcción de obras de bien. Este es el resultado de habitar en armonía y con relaciones justas.
En el salmo 85:10 encontramos un modelo muy interesante, ya que afirma “La misericordia y la verdad se encontraron; La justicia y la paz se besaron3”. Esta afirmación parte de los componentes relacionales como la misericordia (amor) y la verdad como parte de la convivencia humana y al final, establece una relación entre la justicia y paz como condiciones sociales más amplias. Si se entiende el concepto hebreo de Shalom, entonces, esta paz tiene intrínseca un estado de bienestar que es provocado a su vez por la justicia.
Si la paz está vinculada a la justicia, debemos de analizar también este concepto. Desde el texto bíblico entendemos que la justicia de Dios es diferente a la justicia humana. Desde la perspectiva humana, en la antigüedad la ley del talión era la regla para responder a un delito, dar a cada uno conforme a sus actos.
Jesús profundiza en esto en el sermón del monte en Mateo 5:38: “Habéis oído que se dijo: ojo por ojo y diente por diente. Pero yo os digo: no resistáis al que es malo; antes bien, a cualquiera que te abofetee en la mejilla derecha, vuélvele también la otra”.
De esta manera, Jesús pide a sus discípulos mostrar la injusticia con la justicia y tener una actitud distinta a la venganza. La justicia de Dios es una justicia que restaura y transforma. Pasamos de la condición de pecadores a justificados por gracia y llamados a ser rectos.
Un proyecto por la paz y justicia que es como una semilla de mostaza
La ILC llegó a mi vida en el momento preciso. Actualmente, soy docente universitaria, trabajo en el área de planeación y estoy concluyendo un doctorado en psicología social. Estoy casada con Erick Araiza a quien conocí en COMPA México (mi movimiento nacional IFES) y tenemos una pequeña hija de 3 años, Constanza.
A lo largo de mis años en la Universidad, creía haber integrado mi saber académico con la fe, sobre todo al trabajar temas vinculados con la justicia. Mi tesis doctoral tiene que ver con los efectos y dinámicas de la desaparición de personas por el crimen organizado, así como el desarrollo de pautas para el acompañamiento psicosocial desde la justicia restaurativa.
Sin embargo, en la ILC descubrí que la fe que se vincula con la razón tiene que integrar verdaderamente el conocimiento psicológico con la teología. A través de esta iniciativa, encontré un lugar para llevar estas reflexiones al ministerio estudiantil y animar a los estudiantes a ver su profesión como una herramienta para trabajar por la justicia y la paz, sin importar la rama del conocimiento que estudien. Quiero ayudar a los estudiantes y a los jóvenes académicos a enfocar su contexto desde su doble ciudadanía: la del Reino de Dios y la de la sociedad vinculada con su formación profesional.
Así surgió mi proyecto de la ILC “Abriendo Caminos de justicia y Paz”. Este proyecto aunará perspectivas de justicia y paz de las ciencias sociales y de la fe cristiana.
La base de mi proyecto es la convicción de que los estudiantes de Compa México son fundamentales para cambiar la situación de violencia. Ellos pueden detonar acciones creativas de esperanza y transformación.
Desde el inicio del proyecto se planteó la propuesta de trabajar con un obrero local, así comencé a colaborar con Maritza López Osorio. Durante sus años de estudiante, perdió a un buen amigo de su célula de estudio bíblico, porque fue víctima del crimen organizado. Maritza tomó el reto de participar en este proyecto, ha compartido sus dones y ejemplo, plasmando sus propias reflexiones sobre el tema e inspirando a los estudiantes.

En 2022, se están llevando a cabo las siguientes acciones en el proyecto: 1) Dos talleres de formación para estudiantes y obreros, donde crearon iniciativas para trabajar por la paz y justicia en sus contextos y campus; 2) Un foro académico-teológico sobre justicia y paz, 3) Una investigación sobre las actitudes de los universitarios mexicanos sobre guerra, justicia y paz, con el fin de desarrollar una publicación científica.
El 12 de noviembre se llevó a cabo el foro teológico donde participaron más de 75 personas, incluyendo estudiantes, obreros, profesionales e individuos de otras organizaciones e iglesias en México que estaban interesados en el tema. Varios panelistas expertos en el tema analizaron el problema de la violencia desde la perspectiva bíblica, de las ciencias sociales y de las iniciativas cívicas. Las ocho presentaciones están disponibles en mi blog y en YouTube.

Encuentros en el sur y reflexiones sobre violencia hacia la mujer con la Dra. Elaine Storkey
La ILC también me ha implicado en encontrarme con otras y otros investigadores cristianos que también buscan integrar sus múltiples experiencias académicas y de fe de una manera seria y profunda. En septiembre del 2022 participé en la Consulta de la ILC Latinoamérica llevada a cabo en Santiago de Chile. Pudimos encontrarnos presencialmente después de un año y medio trabajando de manera virtual. Fue posible ampliar las reflexiones, ser formados con talleres, y además pudimos disfrutar de un tiempo muy valioso en comunidad.
Durante la consulta, fuimos desafiados por las conferencias de la Dra Elaine Storkey, socióloga, filósofa y teóloga. Ella compartió su visión y lectura bíblica y social de la violencia hacia la mujer, que ocurre en todas las etapas de la vida y en todas las culturas y sociedades. Nos llevó a reflexionar sobre cómo se manifiesta de manera cruda e injusta en distintos lugares, señalando que es importante que se hable al respecto y que se desarrollen proyectos que puedan responder a este tipo de violencia
Lamentablemente en Latinoamérica, la realidad no es muy diferente con una gran cantidad de feminicidios, entre otros delitos. Me sentí identificada con la conclusión que compartió de que muchos de estos problemas no suelen ser un tema de análisis en las comunidades de fe. Doy gracias a Dios por el hecho de que ella comparta su experiencia y lleve esta reflexión en distintos espacios.
Como dije al inicio, recordando las palabras de Galeano, ninguna acción es pequeña ante la violencia para mostrar al mundo el Shalom de Dios, desde las reflexiones bíblicas, los libros, los proyectos, las ideas para llevar a los campus, las investigaciones, foros, así como todos los trabajos desde la ILC.
Te invito a orar por la construcción de paz desde la fe, por México y Latinoamérica, para que los creyentes podamos dar testimonio del evangelio de paz, restaurando, reconciliando y tejiendo esperanza desde las relaciones interpersonales, lo cual sin duda tendrá un impacto en la dimensión cultural, política y social en la región.
Para descubrir más:
- Ve el video de 3 minutos donde Sandra explica su proyecto
- Sigue los avances de Sandra y del proyecto en su blog personal
- Descubre los proyectos de nuestros 18 catalizadores en nuestras páginas web de proyectos
NOTAS FINALES:
2 Global Peace Index Report (2022), produced by the Institute for Economics and Peace: https://www.economicsandpeace.org/wp-content/uploads/2022/06/GPI-2022-web.pdf
3Versión Reina Valera 1960